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Bandera oficial del país de Afganistán |
El país de Afganistán es un conjunto de tierras altas divididas por cadenas montañosas (de las cuales la principal es el Hindu Kush, de dirección este-oeste) que convergen hacia el "nudo" montañoso de Pamir en el Himalaya. En los valles del este se encuentran las principales ciudades.
El país es seco y rocoso, pero hay muchas llanuras y valles fértiles donde, aprovechando el agua de pequeños ríos y pozos se cultivan frutas, cereales y algodón. Carbón, gas natural y mineral de hierro son los principales recursos minerales. El rápido incremento de la tasa de deforestación constituye el problema ambiental fundamental. La escasez de agua potable ha contribuido al aumento de las enfermedades infecciosas.
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Ubicación |
Con el fin de la guerra fría Estados Unidos se enfrentaba a la competencia de dos bloques económicos emergentes: el de Europa y Asia Central. La primera potencia mundial presentó un descenso en su fuerza económica con relación a la Unión Europea y al bloque económico de Asia Oriental (los tigres Asiáticos); bajo esta perspectiva existía la posibilidad de ser excluido económicamente del territorio Euroasiático, es por ello que las intervenciones estadounidenses no deberían ser consideradas solamente como reacciones a los ataques.
Tras un corto período no exento de conflictos internas, los talibanes (estudiantes religiosos islámicos) se hicieron con el poder al conquistar Kabul en septiembre de 1996 y ajusticiar al ex presidente Najibullah, imponiendo una dictadura radical islámica. En el año 2001 moriría asesinando el general Massud, el León de Pandjchir, líder de la opositora Liga del Norte, y tan sólo unos meses después, tras los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001, que destruyeron las Torres Gemelas del World Trade Center de Nueva York, se iniciarían los ataques aéreos norteamericanos al amparo de la Resolución 1368 del Consejo de Seguridad de la ONU, en octubre de 2001, para forzar al régimen talibán a que entregase al líder de Al Qaida, Osama Bin Laden, marcando la tercera y última guerra, que conseguiría inicialmente derrocarles el 6 de diciembre de ese año, pero no su resistencia, que en forma de insurgencia, dura hasta nuestros días.
En el año 2003, incapaces las fuerzas armadas norteamericanas de mantener dos guerras a la vez en Irak y Afganistán, traspasaron el conflicto de ésta última nación a la OTAN, que a partir de ese momento asumiría la difícil tarea de pacificar los 652.225 km2. del territorio afgano, superficie superior en un 25 por ciento a la de España.
Kush, al Norte de la capital, Kabul. De ahí el carácter duro y sufrido de los afganos, considerados unos excelentes guerreros, que mantienen orgullosos el sentimiento de independencia, siendo su país considerado como el cementerio de los imperios, al no haber sido sometido nunca por ningún invasor, pulverizando al poderoso Ejército británico en el siglo XIX
y doblegando al soviético en el XX.
La formación de los 134.000 efectivos del Ejército Afgano y los 160.000 policías que reclama el ministro del Interior Atmar es una tarea primordial que debe ir en paralelo con la reconstrucción del país, la reparación o creación de nuevas infraestructuras, como la presa de Kadhsaki en Helmand, dañada por las bombas norteamericanas en 2001, la finalización de la autopista denominada Ring Road, que circunvala todo el país y la creación de nuevos cultivos en el Sur son algunas de las acciones que ayudarán a una más temprana terminación del conflicto, junto con las inversiones en enseñanza.